Franz Liszt

Franz Liszt fue un compositor húngaro y uno de los pianistas más famosos. El empezó su carrera musical muy temprano como un niño prodigio, estudió con Antonio Salieri y Carl Czerny en Viena. El entonces fue con su familia a París en 1823, donde estudió con el compositor Anton Reicha.

Liszt fue amigo de muchos de los iconos culturales del siglo XIX, tal como los compositores Berlioz, Richard Wagner y Frederic Chopin, así como artista Eugene Delacroix y poeta Heinrich Heine.

 

Uno de las situaciones más importantes en la vida juvenil de Liszt fue presenciar los conciertos del violinista Niccoló Paganini, algose ha dicho haberlo inspirado en su búsqueda de hacer del piano el instrumento supremo de virtuosismo.

 

De joven, Liszt tuvo una relación con la Condesa Marie d’Agoult ( ella era escritora) tuvieron tres niños. su hija Cosima (nacida en 1837) que con los años llegó a casarse con Wagner.

La relación de Liszt con la Condesa terminó finalmente, y Liszt fue a vivir con la Princesa Caroline Sayn-Wittgenstein, quien fue quien lo llevo a componer, más que a interpretar. Sea como fuere eso, Liszt – a pesar de ser uno de los pianistas virtuosos más célebresde todos los tiempos- abandona la etapa del concierto en 1847, y subsiguientemente sólo realizado algun concierto rara vez en público (por ejemplo. en acontecimientos de caridad y ocasionalmente en clases).

Los años que siguieron a menudo son denominados los «años de Weimar», como Liszt se asentó en Weimar (donde él había tenido previamente una posición como director musical) y pasó a componer algunos de la mayoría de sus obras maestras importantes.

Esto incluye la Sinfonía de Fausto y los poemas sinfónicos – una forma que Liszt ha creado .En esos años, Liszt compuso también dos conciertosi de piano y Totentanz para l piano y orquesta. También en esa época, su apoyo a Wagner, así como su enfoque general de la vanguardia en la composición,con divisiones considerables causadas entre dos escuelas de la música – la escuela futurista de Weimar y la escuela más conservadora de Leipzig. El último esta representada por famosos compositores como Johannes Brahms, Felix Mendelssohn y Robert Schumann.

Alrededor de 1860, Franz Liszt se asentó más o menos permanentemente en Roma, donde tomó las órdenes secundarias y llegó a ser Abbad Liszt. Aquí su producción consistió principalmente en música religiosa, tal como el Oratorio Christus y La Leyenda de S. Isabel.

En el período último de la vida de Liszt tuvo como resultado una modificación considerable en su estilo musical – y Liszt abandonó su estilo virtuoso previo a favor de un enfoque composicional, absoluto y desolado.

Durante sus últimos años, Franz Liszt dejó su romanticismo más o menos enteramente y se adelantó dirigiendose a la atonalidad del siglo XX. Esto sorprende especialmente considerando que éll fue de hecho un arquetípico romántico de su tiempo en sus años tempranos.

Liszt compuso un gran número de obras para piano.

Mientras su Sonata_en_B_menor (1853) a menudo es considerada su composición más grande para piano, uno puede mencionar muchos trabajos que pueden tener merecido aún más o igualmente tal título. Por ejemplo el Années de Pèlerinage contiene muchas obras maestras que describen las impresiones de Liszt sobre Suiza e Italia (la última colección que contiene la famosa «Sonata del Dante» y el tarantelle). Su Hungarian_Rhapsodies, mientras subsiguientemente criticado como por ejemplo por Bartók diciendo deLiszt que dedicaba su forma de obras a las tradiciones de gitanos antes que a la música folklórica húngara verdadera, sin embargo sus obras populares de concierto esan compuestas con una combinación típica que va de la alegría a la melancolía y cercano al frenesí.

Muchos trabajos de piano de Liszt no son composiciones sino transcripciones originales de música de compositores.

Sin embargo, Liszt influye generalmente estos trabajo hasta tal punto que ellos llegan a sentirlos propio. Esto es especialmente verdad en el caso de las paráfrasis operísticas.

No quiero en estos parrafos dedicados a los músicos hablar de la parte tecnica de sus obras, sino hacer hincapie en sus personalidades.

Liszt, fue una persona que amó ayudar a otros músicos, desconocidos, introduciendolos en el ambiente musical o tocando sus obras. Entre ellos estuvo Chopin, con se cuenta una anécdota de su presentación como pianista.

Su solidaridad no se limitó a hacer famosos a muchos músicos de la epoca y sus obras, sino que también como en el caso de cuando ocurre el desastre debido al aumento de las aguas del río Danubio, Liszt realiza una serie de conciertos para ayudar a los damnificados de la tragedia.

En un concierto, pidió que apaguen los candelabros, diciendo que tocaría a oscuras. Comenzó a oirse la música, y cuando el auditorio, estaba embelezado escuchando se fueron prendiendo los candelabros, y apareció Chopin tocando sus obras.

Franz Liszt provocaba un frenesí cuando se presentaba ante el público, que muchas damas caían desmayadas por la emoción.

Su posición en el piano, era echado hacia atrás, pues consideraba que de esa forma los brazos y manos estaban libres para «correr» por el teclado.

Era muy típica de él, esa posición ante el piano. Inlcuso se ve esto reflejado en retratos.

Franz Liszt también investigó nuevos procedimientos musicales con su técnica de variaciones sobre un tema, y lo puedes apreciar en la Sonata en si menor (1853); presta atención cómo las sencillas notas del comienzo se van transformando, para irse envolviendo con sucesión de coloridos y armonías.

Esta técnica y sus armonías cromáticas influyeron en la obra de otros músicos, como Wagner, Strauss ( Richard). Sus composiciones para piano requieren una técnica superior y revolucionaria que otorga al instrumento un color y sonoridades completamente nuevas. En su momento, y ahora, a pesar de los años transcurridos.

Fue Maestro, entre otros de Hector Berlioz y Cesar Franck.

Liszt, como buen escorpiano, tuvo su doble tendencia. Por un lado, la religiosa, y por otro, la mundana, la de los excesos amorosos.

Nunca dejó de viajar, y la muerte lo sorprende en Bayreuth el dia 31 de julio de 1886.

Información de: Músicos Clásicos

 

 

Antonio Vivaldi

(Antonio Lucio Vivaldi; Venecia, 1678 – Viena, 1741) Compositor y violinista italiano cuya abundante obra concertística ejerció una influencia determinante en la evolución histórica que llevó al afianzamiento de la sinfonía. Igor Stravinsky comentó en una ocasión que Vivaldi no había escrito nunca quinientos conciertos, sino «quinientas veces el mismo concierto». No deja de ser cierto en lo que concierne al original e inconfundible tono que el compositor veneciano supo imprimir a su música y que la hace rápidamente reconocible.

Autor prolífico, la producción de Vivaldi abarca no sólo el género concertante, sino también abundante música de cámara, vocal y operística. Célebre sobre todo por sus cuatro conciertos para violín y orquesta reunidos bajo el título Las cuatro estaciones, cuya fama ha eclipsado otras de sus obras igualmente valiosas, si no más, Vivaldi es por derecho propio uno de los más grandes compositores del período barroco, impulsor de la llamada Escuela veneciana (a la que también pertenecieron Tommaso Albinoni y los hermanos Benedetto y Alessandro Marcello) y equiparable, por la calidad y originalidad de su aportación, a sus contemporáneos Bach y Haendel.

Biografía

Poco se sabe de la infancia de Vivaldi. Hijo del violinista Giovanni Battista Vivaldi, el pequeño Antonio se inició en el mundo de la música probablemente de la mano de su padre. Orientado hacia la carrera eclesiástica, fue ordenado sacerdote en 1703, aunque sólo un año más tarde se vio obligado a renunciar a celebrar misa a consecuencia de una enfermedad bronquial, posiblemente asma.

También en 1703 ingresó como profesor de violín en el Pio Ospedale della Pietà, una institución dedicada a la formación musical de muchachas huérfanas. Ligado durante largos años a ella, muchas de sus composiciones fueron interpretadas por primera vez por su orquesta femenina. En este marco vieron la luz sus primeras obras, como las Suonate da camera Op. 1, publicadas en 1705, y los doce conciertos que conforman la colección L’estro armonico Op. 3, publicada en Ámsterdam en 1711.

Aun cuando en tales composiciones se dan todavía las formas del «concerto grosso», la vivacidad y la fantasía de la invención superan ya cualquier esquema y atestiguan una tendencia resuelta hacia la concepción individualista y por ende solista del concierto, que se halla mejor definida en los doce conciertos de La stravaganza Op. 4: estructura en tres movimientos (allegroadagioallegro), composición más ligera y rápida, casi exclusivamente homofónica, y modulación dinámica y expresiva, inclinada al desarrollo del proceso creador y fuente de nuevas emociones e invenciones.

Con estas colecciones, Antonio Vivaldi alcanzó en poco tiempo renombre en todo el territorio italiano, desde donde su nombradía se extendió al resto del continente europeo, y no sólo como compositor, sino también, y no en menor medida, como violinista, pues fue uno de los más grandes de su tiempo. Basta con observar las dificultades de las partes solistas de sus conciertos o sus sonatas de cámara para advertir el nivel técnico del músico en este campo.


Vivaldi

Conocido y solicitado, la ópera, el único género que garantizaba grandes beneficios a los compositores de la época, atrajo también la atención de Vivaldi, a pesar de que su condición de eclesiástico le impedía en principio abordar un espectáculo considerado en exceso mundano y poco edificante. De hecho, sus superiores siempre recriminaron a Vivaldi su escasa dedicación al culto y sus costumbres laxas.

Inmerso en el mundo teatral como compositor y empresario, Ottone in Villa (1713) fue la primera de las óperas de Vivaldi de la que se tiene noticia. A ella siguieron títulos como Orlando furioso, Armida al campo d’Egitto, Tito Manlio y L’Olimpiade, hoy día sólo esporádicamente representadas.

Robert Schumann

Robert Schumann (Zwickau, 8 de junio de 1810 – Endenich, hoy en día Bonn, 29 de julio de 1856) fue un compositor y crítico musical alemán del siglo XIX. Es considerado uno de los más grandes y representativos compositores del Romanticismo musical.

Su vida y obra reflejan en su máxima expresión la naturaleza del Romanticismo: pasión, drama y alegría. En sus obras, de gran intensidad lírica, confluyen una notable complejidad musical con la íntima unión de música y texto.

Su nombre completo era Robert Alexander Schumann.1 Nació en la ciudad alemana de Zwickau, en el actual estado federal de Sajonia. De niño Schumann ya puso de manifiesto sus dotes musicales. Su padre, de profesión editor, le apoyó y le procuró un profesor de piano. A los siete años Schumann compuso sus primeras piezas musicales.

Así, en esa etapa de su vida no sólo componía obras musicales, sino que también redactaba ensayos y poemas, y de hecho el joven Schumann se identifica tanto con la literatura como con la música. A los 14 años escribe un ensayo sobre la estética de la música. Ya desde que estudiaba en el colegio absorbe la obra de Schiller, Goethe, Lord Byron, así como los dramaturgos de la Grecia Clásica; pero la influencia literaria más poderosa y permanente es sin duda la de Johann Paul Friedrich Richter. Tal influencia puede apreciarse en sus novelas de juventud, «Juniusabende» y «Selene», de las cuales sólo la primera fue concluida (1826).

Su interés por la música había sido estimulado desde niño al escuchar tocar a Ignaz Moscheles en Carlsbad, y en 1827 a través de las obras de Franz Schubert y Felix Mendelssohn.

Su padre, que tanto había fomentado la educación de Robert como pianista y escritor, fallece en 1826;2 su madre no aprueba la dedicación a la carrera musical y en 1828 lo envía a estudiar Derecho a la Universidad de Leipzig. Pero no tardó en abandonar los estudios para consagrarse enteramente a la música.

El abandono de la carrera de concertista[editar]
Hacia 1830, Schumann deseaba por encima de todo convertirse en un virtuoso y admiraba la ejecución de los más renombrados concertistas de su época, como el celebérrimo violinista Niccolò Paganini, a quien escuchó en Fráncfort del Meno en la Semana Santa de 1830, y al también celebérrimo pianista Franz Liszt. Por tanto, el joven Schumann, de innegable talento como pianista, se empleó a fondo en perfeccionar su técnica de teclado, inventó un aparato por el cual conseguiría más control y agilidad en su cuarto dedo de la mano derecha; sin embargo cuando se lo quitó, su dedo estaba totalmente inutilizado, lo que le obligaría a abandonar su carrera como pianista y convertirse finalmente en uno de los más reconocidos compositores de su siglo.

Entre sus amigos se encontraba Friedrich Wieck (padre de Clara, su futura esposa), notable pedagogo musical, que le dio lecciones. Después de abandonar a Wieck prosiguió solo estudiando piano. Existen varias fuentes que difieren respecto a cómo dañó Schumann su mano derecha en 1830, siendo la más popular la de que para fortalecer el dedo anular ideó un aparato que de hecho lo inutilizó casi completamente (la musculatura del dedo anular está conectada al dedo corazón, convirtiéndolo en el dedo más débil). Otras fuentes citan una cirugía fallida, y otras los efectos secundarios de la medicación a base del tóxico mercurio para la sífilis. De cualquier modo, las esperanzas de Robert Schumann de emular a los virtuosos, o tan siquiera de llegar a destacar como concertista, se desvanecieron.

Desde su adolescencia Schumann había compaginado sus diversas actividades y estudios con la composición y ya había creado obras importantes, sobre todo para piano, pero también sinfónicas y de cámara. Desde ese momento se entrega con pasión a la composición, comienza a estudiar teoría con Heinrich Dorn, director de la ópera de Leipzig.

Compositor y crítico[editar]

Schumann en 1839.
En paralelo a su nueva actividad como compositor, iniciaba su obra de crítico musical, que generó una abundante producción literaria. Su excepcional formación y aptitud literaria se plasmaban en críticas musicales, en las que, a través de personajes imaginarios, profundizaba en las obras de sus contemporáneos. Un famoso ejemplo es su ensayo sobre las variaciones de Chopin sobre un tema de Don Juan, que apareció en el Allgemeine Musikalische Zeitung en 1831.

Su Opus 2 Papillons (Fr., «Mariposas») escrito en 1831 es otro ejemplo excepcional de la fusión entre literatura y composición musical de Schumann. Se trata de una composición para piano, que consta de varias escenas de danza inspiradas en una fiesta de disfraces. Cada danza trata de retratar a diferentes personajes y no guardan relación entre sí, excepto la última. Según escribiría el propio Schumann, está inspirada en la última escena de la obra Flegeljahre de Johann Paul Friedrich Richter y mezcla el carácter festivo con un extraordinario sentimiento melancólico.

La muerte en 1833 de su cuñada Rosalie y de su hermano Julius le causaron una crisis nerviosa. Las crisis, depresiones, periodos de reclusión completa etc. fueron frecuentes en la vida de Schumann y se acentuaron a partir de 1834, continuando en aumento hasta su muerte (incluso llegando a escuchar voces y experimentar alucinaciones). Este declive psíquico se relacionó inicialmente por los historiadores del siglo XIX con la sífilis (o con el desastroso tratamiento médico a base de mercurio, habitual en la época y casi peor que la enfermedad en sí), pero la posibilidad ha sido descartada debido a que los síntomas de desequilibrio mental de Robert Schumann ya eran evidentes desde su juventud, antes de que cualquier síntoma de la sífilis pudiera haberse manifestado. La teoría más aceptada actualmente es que padecía de trastorno bipolar (enfermedad maníaco-depresiva). Pero la gran intensidad creativa de Schumann se concentraba en sus periodos de lucidez, de forma admirable. Tan pronto como se restablecía de un período de enfermedad, se entregaba frenéticamente a la composición, trabajando de modo incansable. No sólo escribía las melodías principales ni se limitaba a las obras para piano, sino que pese a estar en un estado físico y mental muy degradado, escribía la instrumentación sinfónica completa de todas sus obras, hasta la extenuación.

Tras recobrarse de esta crisis, en 1834 fundaría la revista Neue Leipziger Zeitschrift für Musik, abanderada de las nuevas corrientes musicales defendidas por La Cofradía de David, que dirigió hasta el fin de su vida. Es en esta publicación donde da rienda suelta a su crítica musical, considerada en aquella época como excéntrica, pero que hoy día etiquetaríamos como visionaria. A principios del siglo XIX, compositores como Wolfgang Amadeus Mozart, Ludwig van Beethoven y Carl Maria von Weber eran vistos como figuras menores[cita requerida], por lo que se consideró una excentricidad que Schumann los elevara como grandes compositores, por no hablar de su aprecio a figuras contemporáneas, como Chopin o Héctor Berlioz. En esta nueva publicación, hizo todo esto y mucho más.

En el verano de 1834 se enamora de Ernestine von Fricken, una chica de 16 años con quien mantendría una breve relación que él mismo rompería al acabar el año. Es durante este flirteo cuando compone su obra más aclamada, Op. 9, Carnaval. Se trata de variaciones sobre las notas que componen la palabra Asch (pueblo natal de Ernestine) en la notación musical alemana. También son las letras con alguna nota equivalente en el propio apellido de Schumann. Cada variación comienza con esas notas y, más que nunca, Schumann emplea para la composición la ilustración musical de una historia, con personajes y guion bien definidos. Además consolida el formato de composición que ya inició en Papillons, creando temas muy breves y generalmente no relacionados entre sí, aunque estén inspirados en la misma escena literaria. La mayoría de las composiciones para piano de Schumann están formadas por movimientos que duran pocos minutos, o incluso menos de un minuto.

Conoció personalmente a Mendelssohn en casa de Friedrich Wieck en el año 1835 y le mostró su admiración; poco después conocería a Chopin. Durante toda su vida Schumann mostró hacia sus compañeros músicos una amistad sincera y una actitud de crítica constructiva, libre de rivalidades, algo poco frecuente en un crítico musical que también es compositor. Esta actitud abierta y generosa le permitió ser el «descubridor» de Johannes Brahms cuando éste sólo era un joven y desconocido pianista de 20 años. Brahms se convirtió en íntimo amigo de Schumann (y de su esposa Clara Wieck, especialmente en los años en los que la enfermedad de Schumann se agravó) y se vio claramente influido por su música.

Información de WikiPedia